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Con profunda tristeza y gran pesar, debo comunicarles que el proyecto de ley “Borrón y Cuenta Nueva 2.0” no logró avanzar en el Congreso. A pesar de los esfuerzos y el compromiso de muchos, la Comisión Primera del Senado no agendó el proyecto para su debate, bloqueando así una iniciativa que tenía el potencial de transformar positivamente la vida de millones de colombianos.
Como autor del proyecto quiero recordarles que esta propuesta tenía como objetivo extender el régimen de transición de la Ley 2157 del 29 de octubre de 2021. Esta ley, conocida popularmente como “Borrón y Cuenta Nueva”, permitió que miles de colombianos limpiaran sus historiales crediticios tras la pandemia de Covid-19. El proyecto “Borrón y Cuenta Nueva 2.0” buscaba continuar con este alivio, eliminando los reportes negativos de las personas que pagaran sus deudas durante un año más.
El impacto de esta iniciativa hubiera sido significativo, beneficiando a más de 5 millones de colombianos que están reportados en las centrales de riesgo. La eliminación inmediata del registro negativo para aquellos que pagaran sus deudas no solo incentivaría el cumplimiento de las obligaciones financieras, sino que también abriría puertas a nuevas oportunidades de crédito, fomentando el emprendimiento, el acceso a vivienda y el crecimiento económico.
Es importante resaltar que esta propuesta contó con un apoyo considerable en la Cámara de Representantes en los primeros dos debates. En Plenaria, recibimos más de 46 proposiciones de diferentes partidos, de las cuales 30 fueron avaladas, demostrando un consenso amplio sobre la necesidad de esta medida. Sin embargo, la falta de disposición para agendar el debate en la Comisión Primera del Senado impidió que se lograra su aprobación.
Lamentablemente, el poder de los bancos y su influencia política lograron que no se agendara el proyecto en el Senado. Es triste y preocupante que en nuestro país los intereses de los bancos prevalezcan sobre los derechos de los ciudadanos. No obstante, quiero decirles esto: seguiremos insistiendo. El 20 de julio volveremos a radicar el proyecto y lo haremos más fuerte. Vamos a hacer todo lo posible para que no nos mamen gallo en la Comisión Primera del Senado cuando tenga que pasar allá.
Esperaba un desenlace distinto, pero a pesar de insistir varias veces, no quisieron escuchar. La gente tiene derecho a salir de Datacrédito. No pueden seguir abusando de los colombianos. No puede ser que una persona pierda su vida crediticia por deber 1.000 pesos de un celular o de una factura de servicios públicos. Eso no puede seguir pasando.
Nuestra determinación de lograr un sistema financiero más justo y accesible no se detendrá aquí. Continuaremos trabajando incansablemente para asegurar que esta reforma crucial se convierta en una realidad. Estamos comprometidos con todos los colombianos que anhelan un cambio verdadero y tangible.
Esta lucha es por todos aquellos que, debido a la crisis económica exacerbada por la pandemia y la profunda inequidad de nuestro país, se encuentran atrapados en una espiral de deudas y reportes negativos. Nuestro objetivo es darles una segunda oportunidad, permitirles acceder al crédito y contribuir a la reactivación económica. Sabemos que muchos aún se están recuperando y que el acceso a crédito es esencial para la reconstrucción de sus vidas y la reactivación de la economía nacional.
Agradezco profundamente el apoyo y la confianza de todos los que han creído en esta iniciativa. Les pido que no pierdan la esperanza. Seguiremos adelante, luchando por un país más justo y equitativo, donde todos tengan la oportunidad de un nuevo comienzo. Esta no es una derrota definitiva, sino un desafío más en nuestro camino hacia la justicia social y la equidad económica.